jueves, 15 de octubre de 2009

Ay ay ay de la grifa negra

En esta poesía Julia de Burgos nos presenta la evolución de la raza como identidad puertorriqueña. Primero nos presenta a la esclava africana como negra pura, y su identidad personal con esta raza. Describe la negrura como elemento físico plasmado en el pelo, los labios y la nariz, pero sobre todo en el color de la piel. Al principio nos muestra esa identidad negra que en sus comienzos era una raza pura.

También relaciona la raza negra con la esclavitud, vinculando a su abuelo como esclavo que fue literalmente vendido por dinero. Julia critica vehemente la esclavitud de una manera muy humana. Nos dice que si la raza negra hubiese sido la de los amos, se sentiría avergonzada y sin conciencia.

Luego nos muestra la evolución de la raza puertorriqueña a través de la historia, la fusión inevitable de la raza negra con la blanca: el mulato. Julia describe a la nueva raza como trigueña, que ha venido a ser la manera de describir a aquellos puertorriqueños que presentan ese fabuloso tono de piel que se encuentra en algún espectro de un arco iris con dos extremos: uno negro y uno blanco. Julia finalmente acepta la nueva raza y en esencia la exalta y la glorifica como la nueva realidad de América. Es como si nos señalara que ya se rompieron las barreras y no hay vuelta hacia atrás, que la fusión es inevitable, que ya es parte de nuestra realidad y de una nueva visión, que debemos aceptarla con alegría y orgullo, y que debemos divulgarla a los cuatro vientos. El anuncio es claro, ha nacido una nueva raza, y con ella nace el puertorriqueño. ¡Que viva Borinquen bella!

No hay comentarios:

Publicar un comentario